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El día siete de noviembre de 1936 ocurrió un hecho que nunca olvidará constanza. Dechén se fue con Jacobo par hacer lo que había pensado, una vez que llegaron allí  empezaron a grabar la pirueta que iba a hacer Joaquín. Al hacer la pirueta algo salió mal y del motor empezó a salir humo, empezó a dar vueltas la avioneta  y fue poniendo letra a letra el nombre de Constanza. Él no tenía que contarle nada a Constanza ya que Joaquín era un amigo suyo y le había visto morir. De repente oyeron escuchar a un bombero y un técnico que habían robada la avioneta y los únicos que sabían quién había robado la avioneta eran ellos. El técnico le preguntó que si él tenía todo grabado y Jacobo que era el que había grabado todo respondió que no para no decirles quien era, un vez ocurrido todo esto Jacobo se quedó con el disco y el escritor frustrado le pidió una copia porque decía que era familiar suyo.